La eficiencia energética se logra con sentido común …
El enfoque individual para reducir las emisiones de carbono implica sentido común, reflexión y cuestionamiento de hábitos. En la industria, es lo mismo.
¿Son todavía relevantes hoy en día los métodos de operación que se utilizaban hace 20 o 30 años, dada la situación ambiental actual?
¿Es posible revisar el proceso de fabricación sin desequilibrar toda la cadena de producción y adoptando un enfoque de cambio eficiente y más respetuoso con la energía?
¿Qué es la eficiencia energética?
En un contexto de transición energética, ajustar su consumo (electricidad, gas, petróleo) y reducir su huella ambiental en diversos ámbitos se convierten en acciones esenciales. En la era de la sobreconsumo, la eficiencia energética invita a repensar su forma de consumo y operación para limitarse a sus necesidades reales.
Como verdadero enfoque, su principal objetivo es reducir los consumos superfluos para limitar los efectos negativos en el medio ambiente.
La asociación négaWatt señala que la eficiencia energética se logra mediante 4 palancas:
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- La eficiencia colaborativa que implica la mutualización de los equipos y su uso.
- La eficiencia dimensional que se refiere al dimensionamiento correcto de los equipos en relación con su condición de uso. Aquí se trata de adaptar el funcionamiento de las máquinas en las industrias según las necesidades reales.
- La eficiencia estructural que consiste en crear en la organización del espacio o de nuestras actividades, las condiciones para moderar nuestro consumo.
- La eficiencia de uso que se centra en el buen uso de los equipos para reducir el consumo.
La guerra entre Ucrania y Rusia, un importante proveedor de energía en Europa, ha aumentado la tensión sobre los precios del gas y del petróleo.
Además, Francia se enfrenta a una disminución de su producción de electricidad debido al mantenimiento de varias de sus centrales nucleares.
Ante el riesgo de cortes de gas y electricidad este invierno, el gobierno, y más específicamente, la Primera Ministra Elisabeth Born, presentó su plan de eficiencia energética el 6 de octubre de 2022 con un objetivo claro: reducir en un 10% el consumo de energía en Francia en dos años y en un 40% para el año 2050.
Dametis se enorgullece de ser signatario del Compromiso de Eficiencia. «Como el colibrí, Dametis hace su parte».
La eficiencia energética en la industria
Una parte importante que destaca el importante desafío que representa este sector. Iniciar un enfoque de eficiencia energética comienza hoy para las industrias para reducir masivamente su impacto ambiental y convertirse en verdaderos actores del desarrollo sostenible en Francia.
Las industrias deben implementar acciones para limitar su consumo y lograr la eficiencia energética. Varios gestos simples pueden ser fácilmente aplicables y representar ahorros sustanciales en las facturas energéticas anuales: apagar las máquinas/aparatos por la noche, invertir en máquinas con menor consumo energético, evitar dejar los aparatos en modo de espera.
La reducción de las facturas energéticas también es un aspecto importante de la eficiencia energética. Y para reducir sus facturas, las industrias pueden recurrir a las energías renovables como la biomasa, la geotermia, y la energía eólica.
¿Cómo tomar medidas?
Primer paso
- Es esencial realizar un análisis de tus consumos energéticos y usos para identificar con precisión las posibles mejoras.
- Crear un plan de acción adaptado a tu empresa.
- Identificar las necesidades reales de tu fábrica, la huella de carbono actual, los costos y los resultados esperados.
- Tomar las medidas necesarias para comprender el funcionamiento de tu fábrica e identificar las áreas de mejora.
- Realizar un estudio detallado para ofrecerte la solución adecuada a tus necesidades.
Segundo paso
- Propuesta de una solución alternativa menos energética y más eficiente que tendrá como objetivo:
- reducir sus consumos y gastos energéticos
- iniciar un enfoque de austeridad energética
- Acompañamiento durante todo su proceso mediante la implementación de las soluciones técnicas y materiales seleccionados.
Tercer paso
- Informes regulares sobre los compromisos asumidos para garantizar el funcionamiento de la solución implementada.
- Seguimiento remoto de la evolución del consumo de sus instalaciones.
Casos de clientes para ilustrar la eficiencia energética
Dametis, junto a los productores de alginato para optimizar su producción
Actividad de producción de algas
Situación actual: Dametis ha trabajado para una industria alemana productora de alginato ubicada en Bretaña, que opera en un mercado de nicho. La fabricación de alginato, a partir de algas, para su uso posterior en la industria alimentaria, cosmética o farmacéutica es un proceso bastante complejo que implica calentar y enfriar el material varias veces.
Paso 1: Reflexión. En lugar de multiplicar las etapas que requieren grandes volúmenes de agua, calentándola o enfriándola repetidamente, se confrontan dos masas de agua: una a 100° y otra a 10° para recuperar la energía de una y utilizarla para enfriar la otra.
Paso 2: Luego, se procede al reemplazo del equipo existente por el recomendado después del análisis para mejorar la eficiencia energética.
Paso 3: Finalmente, llega el momento de la evaluación, sin la cual el proceso no tendría sentido. El equipo revisa los datos iniciales, los compromisos asumidos al inicio del proyecto y evalúa los resultados de la nueva instalación.
Guillaume Lecore, Director de Servicios en Dametis, agrega: «Este es un caso particularmente interesante en Dametis, ya que en lugar de simplemente implementar una instalación de calor en una refrigeración, hemos ido más allá en el proceso para implementar cosas bastante únicas a través de un innovador procedimiento que rompe con la verticalidad de este tipo de industria».
Dametis, junto a los productores agroalimentarios para optimizar su producción
Actividad de producción de cebollas
La situación actual: Una empresa agroalimentaria productora de cebollas desea revisar su proceso de secado con quemadores de gas para optimizar su rendimiento, evitar pérdidas y reducir sus costos energéticos en un contexto donde los precios suelen estar bajo presión y donde la transición energética debe ser inminente. La problemática es la siguiente: al cosechar una cebolla, esta está húmeda. Para que se conserve, es necesario eliminar la humedad, por lo tanto, secarla a una temperatura precisa que no exceda los 22°C para evitar perder sus propiedades y obtener un efecto contraproducente que podría provocar la aparición de podredumbre. Una vez seca, sin embargo, se puede almacenar durante mucho tiempo a 4°C.
Paso 1: Tras un análisis previo del entorno y de la situación actual, se optó por la deshumidificación del aire como método de secado. El equipo de Dametis recomendó utilizar aire exterior para soplar sobre las cebollas y secarlas. Este aire puede luego ser enfriado por una instalación frigorífica, y nuevamente calentado gracias a la energía recuperada por la acción de enfriamiento para finalmente ser soplado sobre las cebollas. De esta manera, puede capturar mucha más humedad y permitir un secado eficaz.
La solución: Implementación de una instalación frigorífica que tiene un rendimiento mucho mejor que el gas utilizado anteriormente, y que funciona con electricidad, por lo que tiene un impacto de carbono mucho más favorable.
Guillaume Lecore, Director de Servicios en Dametis, agrega: «Esta solución se implementó recientemente, haremos un análisis preciso a distancia, pero de inmediato, al reemplazar el gas por una instalación eléctrica, reducimos alrededor del 75 al 80% las emisiones de CO2».
[1] La asociación négaWatt señala que la eficiencia energética se logra con la ayuda de 4 palancas
